virus contra virus
el ocho de diciembre por la noche mi cuerpo se descompuso. estaba caliente, tenía frío, estaba muy débil, tenía naúseas. al día siguiente estuve peor. toda la mejoría de los últimos meses parecía haberse ido por la borda. el estómago mal, los pies fríos, debilidad. tuve miedo. llamé a sacha. no lo encontré. llamé al sentido común. pensé: será un virus estacional, de esos que llegan, te sacuden y se van. traté de estar tranquila. en realidad, tenía miedo. volví a llamar a sacha. tampoco lo encontré. no quise llamar a villegas, el doctor muérdago. es un tío muy amargado.(¿quién le dijo que se hiciera doc?). llamé al mar.
las fuerzas vuelven lentamente.
quiero pensar que el virus de estación se ha llevado consigo a las últimas células malas que andaban sin rumbo por mi cuerpo.
es diciembre, y en vísperas de navidad, quiero pensar que la paz interior todavía es posible.